Laura Madrid, esposa del director de Desarrollo en las Artes del Instituto Cultural de León
(fotografía: vía periódico a.m.)
(fotografía: vía periódico a.m.)
El periódico a.m. de León, Guanajuato, publicó ayer, 10 de mayo, esta nota relacionada con el director de Desarrollo en las Artes del Instituto Cultural de León (ICL), Óscar Garduño Ruiz:
"Castigan 'teatro' de funcionario"
http://www.am.com.mx/Nota.aspx?ID=475286
La corrupción del Instituto Cultural de León, sin embargo, no sólo atañe al funcionario sancionado más de tres meses después de que fuera publicada la denuncia: tanto el Consejo Directivo, encabezado por Alfonso Barajas Medina, como el director del ICL, José Luis García Galiano Robles, en todo momento fueron omisos al respecto.
En este sentido solaparon, avalaron y promovieron un obvio quebranto de la legalidad y un modo de la corrupción de las instituciones públicas frente al que la administración PANista de Ricardo Sheffield Padilla, presidente municipal de León, hizo nada. Sin la eficacia que ha demostrado en su acción la Contraloría municipal leonesa, ideológicamente independiente del gobierno en turno, la corrupción denunciada sin duda persistiría. Una vez más se evidencia que la política cultural promovida por el Partido Acción Nacional está cancerada por la corrupción.
Valga referir al respecto que en la última sesión del Consejo Directivo del ICL, la obra Valentina y la Sombra del Diablo, dirigida -es un decir- por Laura Madrid, la esposa del funcionario ahora defenestrado, todavía fue merecedora de alabanzas, e incluso exhibida como un ejemplo a nivel nacional.
"Castigan 'teatro' de funcionario"
http://www.am.com.mx/Nota.aspx?ID=475286
La corrupción del Instituto Cultural de León, sin embargo, no sólo atañe al funcionario sancionado más de tres meses después de que fuera publicada la denuncia: tanto el Consejo Directivo, encabezado por Alfonso Barajas Medina, como el director del ICL, José Luis García Galiano Robles, en todo momento fueron omisos al respecto.
En este sentido solaparon, avalaron y promovieron un obvio quebranto de la legalidad y un modo de la corrupción de las instituciones públicas frente al que la administración PANista de Ricardo Sheffield Padilla, presidente municipal de León, hizo nada. Sin la eficacia que ha demostrado en su acción la Contraloría municipal leonesa, ideológicamente independiente del gobierno en turno, la corrupción denunciada sin duda persistiría. Una vez más se evidencia que la política cultural promovida por el Partido Acción Nacional está cancerada por la corrupción.
Valga referir al respecto que en la última sesión del Consejo Directivo del ICL, la obra Valentina y la Sombra del Diablo, dirigida -es un decir- por Laura Madrid, la esposa del funcionario ahora defenestrado, todavía fue merecedora de alabanzas, e incluso exhibida como un ejemplo a nivel nacional.
La Feria Nacional del Libro de León 2011 (FeNaL 2011) es organizada por tales actores y en este escenario.